La trama se centra en un joven llamado Kenji que convive actualmente con su hermana adoptiva Yuki. Ella admira a Kenji desde que eran pequeños y siente fuertes sentimientos hacia él. Un día Kenji tiene un sueño de la infancia donde estaba con Yuki y otra chica llamada Hiyori delante de una máquina expendedora y Kenji esperaba sacar un Yo-Yo, pero en su lugar consigue un anillo. Hiyori y Yuki quieren ese anillo y Kenji les propone un reto: la primera de las dos que consiga el Yo-Yo se lo dará.

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Yuki y Hiyori lo intentan varias veces y finalmente Hiyori es quien consigue sacar el Yo-Yo. Pero Hiyori tuvo que irse pronto a casa, por lo que le dio el anillo a Yuki para que se lo diera a Kenji en su nombre. Al recibirlo Kenji piensa que la que consiguió el Yo-Yo fue Yuki, pero ella quería confesar que fue Hiyori la que lo hizo. Desafortunadamente Hiyori se mudó y no la volvieron a ver más.

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En la secundaria, Yuki y Kenji viven solos en casa ya que su padre está fuera trabajando, tienen una convivencia tranquila y asisten al mismo instituto. Todo es normal hasta que una noche dentro del armario de Kenji se oye una voz, asustado lo abre y de ahí sale una joven de su edad. Al principio no la reconoce pero resulta ser Hiyori porque Yuki la reconoce enseguida por el recuerdo de la niña que conocieron hace tiempo.

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Poco a poco se van poniendo al día, aunque Hiyori no parece almacenar muchos recuerdos ni el motivo por el que apareció en el armario de Kenji. Pero lo más extraño de todo es que Hiyori parece ser un fantasma, ya que no puede coger objetos y los atraviesa. Poco a poco ella va apareciendo a menudo por las noches para seguir hablando con Kenji y Yuki, hasta descubrir que está pasando y que es lo que le ata a ellos.